El banco más grande de Australia, Commonwealth Bank (CBA), anunció el 21 de agosto de 2025 que revertía su decisión de recortar 45 puestos de trabajo en su departamento de servicio al cliente. Inicialmente, el banco había planeado reemplazar a estos empleados con un nuevo chatbot de IA, afirmando que la tecnología reduciría la carga de trabajo de los operadores humanos. Sin embargo, esta decisión encontró una fuerte resistencia por parte del Sindicato del Sector Financiero (FSU). El sindicato llevó el caso a un tribunal de relaciones laborales, presentando pruebas de los empleados de que la carga de trabajo no había disminuido, sino que en realidad había aumentado desde la implementación del chatbot, lo que generó la necesidad de horas extras. Ante los hechos y la protesta pública, el CBA admitió que su evaluación era errónea y se disculpó con los empleados. El banco ofreció a los trabajadores afectados la opción de permanecer en sus puestos, pasar a otro puesto dentro de la empresa o marcharse voluntariamente. Este caso se ha convertido en un precedente importante, demostrando que la implementación de la IA debe tener como objetivo ayudar, y no reemplazar, a los empleados, y que los sindicatos pueden proteger eficazmente los derechos de los trabajadores en la era de la automatización.
Bajo la Presión Sindical, el Commonwealth Bank Revierte los Recortes de Empleo Relacionados con el Chatbot de IA
